domingo, 10 de abril de 2011

Anyone, someday, nowhere.

Por que hoy siento como si todo quemase.
Mientras miro el espejo me doy cuenta de que no veo.
No es lo que veo, no es lo que quiero, no es suficiente.
No me hace daño, no me preocupa, no es lo que siento.


Dejé de ver, de mirar, de razonar. 
Y ahora quiero volver a empezar, encontrar lo que antes hacía sentirme realizada. 
Me dejé las ganas en el sur, mientras caminaba se me cayeron y nadie me advirtió... 
Y quien lo hizo, gracias, de veras, pero no escucho. No lo hago. ¿Para qué? 
No quiero escuchar, no quiero pensar, no es necesario.


¿Quién quiere llevar una vida modelo, quién necesita demostrar lo que significa, quien prefiere ser fachada?
Yo, desde luego, no. No. No quiero una vida satisfactoria. No quiero orgullo. No quiero todo esto. 
No quiero prototipos. Odio los prototipos. No los necesito.


¿Quién sigue pensando que esto es necesario? Cuesta. Cuesta todo, y todo más cada vez, más cada día.
Esto va a ser siempre así, hasta que pase por el aro, disconformidad, y nunca poder hacer nada. 
De momento solo me puedo quejar.


Y aun si me quejo, nadie escucha. 
¿Para qué?

2 comentarios:

  1. te paso un porrito a ver si se te pasa el desasosiego?

    ResponderEliminar
  2. Pues eso es lo que mejor me vendría, la verdad !!

    ResponderEliminar